_Levantate, Jorge, ya son más de las 5...
Faltaban casi dos meses para cumplir los 18 años. En la mañana, ayudaba a mi papá con la hortaliza. Luego, me bañaba y me iba al colegio. Los sábados lo ayudaba toda la mañana, mientras él se iba a vender.
Fue un 30 de agosto. Unos hombres se acercaron y por la fuerza me metieron en un carro --jeje, ¿saben que trago grueso al escribir esto? Tan solo de recordar...--. Me llevaban obligado a formar parte del ejército. ¿Ejército de qué, contra quién? ¡¡Pero si solo tenía 17 años!! Cuando se los señalé, insistieron en que no me importaba, que me fuera con ellos. Pero era menor, de edad, no estaba obligado.
Me lanzaron en algún lugar que desconocía... Pero luego de 7 horas logré llegar a mi casa. Olvidé el incidente por un tiempo...
_Levantate, Jorge, son casi las 5... Feliz Cumpleaños, mi vida
Mi mamá hizo un queque. Tan pequeño, tan humilde que solo yo pude comerlo. Pero apreciaba enormemente su esfuerzo. Luego, me fui a trabajar. Lo había olvidado, pero ellos no. Volvieron. Y esta vez, no podía negarme.
Estuve mucho tiempo en la selva. Recuerdo una vez que le dispararon a una culebra amarilla y explotó, salpicando a unos soldados. Creo que fue la única vez que reí en ese mes. ¿Nunca se han sentido atrapados, hartos, como que se ahogan dentro de su propio cuerpo? No tenía nada que me recordara a mi familia, apenas un mensaje para decirles que me iba por un tiempo y ya. Fue triste. Muy triste.
El ahogo, el miedo. No lo pude soportar más. Sabiendo que estábamos cerca de Costa Rica, huí. Tenía miedo. Mucho miedo. Porque sabía acerca del odio de muchos ticos... Con todo el revuelo del bulldog o Doberman... Los comentarios de "Es feo que un ser humano muera así, pero no es un ser humano, es un nica" me aterraban. ¿Y si al final huir no era la mejor solución? ¿Y si paso de ser un esclavo a ser esclavo en otro país?
Pero logré llegar. Logré cruzar el río, logré escapar, logré sobrevivir. Al principio fue difícil. Si la gente te grita cosas. Aprendí a disimular el acento, y eso aún hoy me avergüenza. Me avergüenza porque a pesar de todo, fue una manera de darle la espalda a mi país. De nuevo... siento un nudo en la garganta cada vez que recuerdo Nicaragua... A mis primillos jugando con tierra (hacían ciudades para las hormigas), a mis primas cuando ahorraban para comprarse un vestido nuevo, y cómo lo lucían en todo lado para que la gente les dijera lo lindas que se veían (obviamente se lo compraban entre todas y se turnaban para usarlo... nunca fue buena idea un grupo de mujeres turnándose algo que todas quieren).
Con la distancia, solo valoro más a mi gente. No se imaginan el montón de noches que pasé llorando, recordando las tortillas de mi mamá... Recias, siempre, recias... Y la abuela, que se ponía a jugar bola con los nietos. Pero claro, nunca usó pantalón. Ella se arrequintaba la enagua y se ensuciaba... Esa es la última imagen que tengo de ella... De todos... Porque solo les dijeron que me iría, no me dejaron decírselo en persona...
Lástima que seamos los miles que estamos fuera, que apreciamos lo valioso de estar en Nicaragua. Con todo y sus defectos, y que cada vez más los políticos la joden... No deja de ser lo más hermoso que he visto...
¿Saben de qué me acuerdo? Cuando en el cole cantaba el himno... Y como si nada... Simplemente lo cantaba mientras pensaba en verle el culo a la profe de Mate... Nunca pensé la nostalgia tan grande, el dolor tan fuerte que me provocaría oírlo... Es imposible evitar que el nudo en mi garganta se derrumbe en lágrimas... Es imposible no llorar... Es imposible no añorar, no extrañar, no querer volver con todas mis fuerzas... Es imposible no sentir nostalgia por todo lo que dejé atrás... Las lágrimas... incontrolables, pero cesan. La tristeza, incontrolable, pero permanente.
Continuará...
5 Se han dejado perfumar:
Muy bueno... espero que algún día ellos o sus descendientes canten la patriótica aquí o allá, pero algo de ese sentimiento... uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde.
Muy buen texto. Mi padre es nicaraguense y he aprendido a añorar en sus recuerdos un país que bien que mal algo tiene de patria para mí, que aprecio y quisiera ver bien, visitar a menudo, y no ver a su pueblo en miserías y con los gobernantes que tienen (y se merecen, cada uno tiene los que se merece menos CR) por que a fin de cuentas tal vez no sean mis hermanos, pero son mis primos, mis tios...
Me hizo soñar tu texto... hay mucho dolor en la separacion y la soledad que enfrentan las personas que deben emigar para sobrevivir a cualquier precio.
La tristeza del cumpleaños 18 que lo hace madurar y enfrentar se al mundo como supuesto adulto, en el sufrimiento de la guerra.
Hasta pronto
Terox: Supongo que ese sentimiento es difícil de transmitir
Amorexia: Una excepción a la regla. Siempre es doloroso ver cómo un pueblo sufre por el desorden y avaricia de sus gobernantes.
Mary: Qué triste, ¿verdad? Lo peor es que pasa...
Buen escrito.. Soy nica.
Espero la continuacion :)
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